Por Aramys Uceta
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| El Robot Salvaje / Infograma. |
En un panorama cinematográfico donde las películas animadas a menudo se ven envueltas en mensajes de adoctrinamiento sobre temas que pueden ser inadecuados para los más pequeños, El Robot Salvaje ha surgido como una grata sorpresa. Esta nueva entrega de DreamWorks se aleja de las pretensiones de muchas producciones recientes y se enfoca en lo que realmente importa: el entretenimiento genuino.
El Robot Salvaje aborda, a través de pinceladas sutiles, temas relacionados con la maternidad, la convivencia entre especies y el respeto por la naturaleza. Más importante aún, transmite un poderoso mensaje: sin importar nuestra educación o los roles que creemos que debemos cumplir en la vida, siempre hay espacio para elegir y hacer lo correcto. Esta narrativa positiva resuena profundamente, recordándonos que el cambio y la mejora personal son posibles.
La historia se centra en Roz, un robot que, a pesar de su programación, aprende a desarrollar sentimientos y establece lazos con un pequeño ganso huérfano. Esta relación evoca reflexiones sobre el amor maternal y la capacidad de adaptación en situaciones adversas. El hecho de que El Robot Salvaje inspire a los espectadores a creer en la bondad innata de las personas y en la posibilidad de una convivencia armoniosa es un gran logro.
Personalmente, me recordó a la icónica película de Pixar WALL-E, que también presenta un robot con emociones en un entorno hostil. Al igual que WALL-E, Roz se enfrenta a un mundo que parece en contra de su naturaleza y, sin embargo, encuentra un propósito a través de sus relaciones. Ambos personajes muestran que, a pesar de la adversidad, siempre existe una opción para actuar desde el corazón.
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| WALL-E (Pixar Animation Studios) / Infograma. |
Asimismo, El Robot Salvaje me hizo pensar en la conmovedora película surcoreana Leafie: A Hen into the Wild. En esta obra, Leafie, una gallina, también se encuentra en un lugar hostil y termina criando a un pato huérfano. Tanto Leafie como Roz representan la lucha por la maternidad en circunstancias adversas, y los tres personajes —Roz, Leafie y WALL-E— deben adaptarse a situaciones desafiantes.
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| Leafie: A Hen into the Wild / Infograma. |
A pesar de los temas similares, cada película presenta enfoques distintos. Leafie, por ejemplo, aborda la maternidad y el sacrificio de una manera más desgarradora y directa. Su narrativa cruda, aunque conmovedora, expone las realidades de la supervivencia de manera más valiente, mostrando que las criaturas seguirán sus instintos, independientemente de las convenciones sociales. Mientras tanto, WALL-E y El Robot Salvaje enfatizan la esperanza y la posibilidad de elegir el bien, incluso frente a la programación o las expectativas externas.
Recomiendo fervientemente ver estas tres películas, ya que cada una ofrece una experiencia única y enriquecedora. Desde mi perspectiva, son verdaderas obras de arte que abordan temas profundos a través de narrativas accesibles y emocionantes.
Actualmente, El Robot Salvaje se encuentra en los cines y merece convertirse en uno de los grandes éxitos de taquilla del año. Esta película tiene el potencial de motivar a los productores a seguir creando contenido animado que sea saludable, libre de adoctrinamiento y que, sobre todo, busque entretener a las familias mientras comparte mensajes valiosos. Este es el tipo de cine animado que todos deseamos ver: historias que capturan la imaginación y el corazón de grandes y pequeños por igual.
Su éxito podría allanar el camino para más producciones que prioricen el entretenimiento y la enseñanza sobre la moralidad y la ética. Sin duda, es una experiencia cinematográfica que vale la pena disfrutar en familia.
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